Es la capacidad inherente que posee toda persona de sanarse y reconectarse consigo misma desde su vivir natural y cotidiano en cada momento.
Es una manera de sanar de raíz la desconexión que sentimos todos y cada uno de los seres humanos por el simple hecho de estar viviendo esta experiencia de Vida como la conocemos, separados de la Unidad, de la Fuente, del Creador, del Todo.

Creador de la Sanación desde el Ser.
Una persona que ha conectado con su propósito de vida.
Que estuvo perdido por muchos años, pero se reencontró consigo mismo y comparte esa experiencia con personas que están pasando por situaciones similares.

Enseñando a liberarse de las ataduras y estructuras de nuestro ego para poder sanar las heridas más profundas.
Alguien que es tanto luz como oscuridad. Humano.

Quien empezó a compartir este conocimiento que fue sintiendo, aprendiendo e integrando durante toda su vida después de haber pasado por la oscuridad más grande en estados de depresión y vacío profundo.
Alguien que logró quitarse los velos y sanar las heridas necesarias para poder abrazarse, valorarse, respetarse y amarse al punto de poder abrirse y entregar a otras personas lo que aprendió.

De niño siempre fui una persona muy sensible. De entender cosas que las demas personas de mi entorno no.
Eso me aisló mucho y me hizo sentir mucho abandono principalmente de mi familia, entrando en mi adolescencia.
Esa sensación de abandono y vacío se fue incrementando durante toda mi vida.
 

Pero eso recién empezó a llegar mas profundamente de los 30 años en adelante, al enfrentarme cara a cara con mis heridas, sombras, dolores, miedos y sufrimientos más profundos. Todo eso tenía que salir a la luz. Así empecé a descubrir la herida más prfunda, la herida de desconexión que todos los seres humanos sentimos por el hecho de vivir esta experiencia Humana.
La sanación no es un camino de pura luz como se piensa, tambien hay que pasar por las sombras y heridas para poder conocerlas, integrarlas y liberarlas.
Pero es el único camino a la Sanación real, que es igual al conocimiento de uno mismo y sentir la vida en el interior. Porque uno empieza a conocerse como un ser humano con luces y sombras, en su completitud.

Alrededor de los 25 años fue como mi primer despertar, donde empecé a entender que todo partía de uno mismo. Entonces empece una busqueda interminable de sanación, de entender lo que me pasaba y por qué sentía lo que sentía. Recorriendo diferentes caminos, "espirituales": aprendí Reiki, Terapias de sanación a traves de ergías ZEN, estudié y práctique muchos principios universales, Kundalini Yoga, aprendí de muchos mentores, leí muchos libros de espiritualidad y desarrollo personal, y muchas cosas mas. Todo esto me acercaba un poco más a conocerme a mi mismo y a entenderme en la vida.